Esta expresión se emplea para decir que alguien tiene las ideas fijas y no escucha ni atiende a razones.
Ejemplo:
Quico tiene la cabeza cuadrada y no quiere escuchar a nadie en los temas artísticos.
Arturo y Carmen parece que tienen la cabeza cuadrada cuando hablamos de implantar el teletrabajo en la empresa.
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